Está siendo una mañana de ensueño: me he despertado algo antes de las siete. He ido al baño y después he empezado a practicar yoga. Al terminar, el sol entraba por la ventana y me he quedado meditando sobre el suelo con las piernas cruzadas tal vez veinte minutos. Luego he preparado los cacharros para el desayuno. Daniela y Lucas siguen durmiendo, así que he encendido el ordenador, he respondido un par de comentarios de Manuel y me he puesto a escribir la columna. ¡Qué gozada!
No sé lo que va a durar esto, pero vamos a aprovechar.
Ayer continué avanzando con el curso de creación de páginas web con Django, python y javascript. Terminé el ejercicio planteado para la primera lección y comencé con la siguiente: git.
El ejercicio estuvo bien. Me ayudó a aprender mucho acerca de Bootstrap. Ahora manejo el contenido con más soltura y entiendo mejor cómo funciona. Es una pasada. Con unas pocas clases se formatea todo que da gusto verlo.
Luego empecé con la segunda lección, en la que estoy aprendiendo a usar git.
Para quien no lo sepa, git (¿Git?) es un sistema de control de versiones. Yo lo conozco del trabajo, donde empecé usando Subversion y terminé migrando a git, que manejábamos contra un servidor privado. Lo usaba, principalmente, desde PHPStorm, el entorno de desarrollo de JetBeans específico para PHP. Llevaba el git integrado, así que era muy fácil usarlo. Nunca me había puesto desde el terminal.
Y llevo más de la mitad de la segunda lección y ya tengo mi propio repositorio en git. He aprendido a hacer mis clones, mis pulls, mis commits y mis pushs desde la consola. Es una tontería, pero me parece super-emocionante estar haciéndolo.
¡Estoy haciendo un commit! ¡Ya tengo mi repositorio en git!
Pueden sonar a tonterías, pero me siento muy emocionado por estas cosas.
Llevo usando ordenadores durante décadas y haciendo muchas cosas con ellos, pero siempre creí que había que ser muy listo para aprender a programar y que yo, específicamente, era demasiado tonto para hacerlo, así que tenía que conformarme con otras cosas. Y bueno, después de tantos años, me estoy poniendo y me estoy dando cuenta de que estoy aprendiendo, y de que yo también puedo aprender a programar, que es como cualquier otra cosa. En la vida, todo es empezar. Y empezar es lo más difícil.
Y estoy encantado con mi Bootstrap y con mi git. HTML y CSS ya los tenía por la mano, pero estas dos incorporaciones me tienen encantado. Estoy deseando entrar en la siguiente lección de Python.
Por cierto, el otro día me acordaba del primer libro de ordenadores que tuve.
Me lo regalaron mis padres. Dentro, con dibujitos muy graciosos, explicaban cómo funcionaban los ordenadores. Lo que era la RAM, la ROM, el disco duro, la CPU… Me lo leí un montón de veces.
Y me acordaba del libro y me dio por buscarlo. Y lo encontré:

Edición de 1983.
Qué pasada volver a ver la portada de aquel libro. La de horas que pasé sumergido en aquellas páginas.
¿Cuáles fueron vuestros primeros pasos con los ordenadores?
En mi casa empezamos con una consola Atari, luego un Spectrum ZX 48+, Atari ST 520fm y de ahí al primer PC, un 486 a 66MHz (con el Turbo puesto). La de particiones de Windows que liquidé instalando Linux.
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